La calidad, resistencia y versatilidad del pavimento asfáltico convierte al asfalto en uno de los materiales referencia. La mayoría de las calles y carreteras de nuestro país se han llevado a cabo con este material.
Un pavimento asfáltico es cualquier tipo de pavimento que utilice el asfalto, compuesto por un agregado como la grava y un aglutinante asfáltica. Hay pavimentos con distintos tipos de mezclas asfálticas, más gruesos o más granulares. De ello depende que el pavimento asfáltico tenga mayor o menor resistencia
El pavimento flexible es el más utilizado ya que se coloca en caminos, calles e interior de viviendas y locales por la gran resistencia y durabilidad de su capa. Hay otros productos asfálticos como el pavimento bituminoso y otros que son más difíciles de aplicar. Se utilizan como base el betún y otros derivados de la destilación de hidrocarburos.
Utilizar pavimentos asfálticos tiene un coste accesible. Su montaje es muy sencillo y no requiere mucho tiempo de obra, tanto en el secado como en el enfriamiento. Además, no se necesita maquinaria ni procesos o herramientas complejas para colocarlo. Cuentan con una gran solidez estructural para soportar peso y cargas sin problema y gran resistencia a la intemperie. Otra ventaja es su rápido y sencillo mantenimiento.
El pavimento asfáltico se puede utilizar en carreteras o caminos, independientemente de su tamaño, ya que soporta muy bien las cargas y el peso. También es habitual encontrarlo en patios de maniobra, cocheras, garajes, escuelas, gimnasios o supermercados, o como material impermeabilizante de estructuras con gran durabilidad.
Pavimentos Asfático
El coste por metro cuadrado de este material es bajo si lo comparamos con otros. El precio de
los pavimentos asfálticos dependen según el tipo de proyecto y su composición. También cabe
destacar que el coste de su mantenimiento es muy bajo, lo que también se nota en el bolsillo a
largo plazo.
En Construcciones y Asfaltos CONASFAL recomendamos elegir pavimento asfáltico por su bajo coste, su reducido tiempo de montaje y fácil mantenimiento.
Este material es perfecto para cubrir grandes extensiones sin un gran desembolso económico.
Confundir el pavimento de hormigón y el pavimento de asfalto puede tener consecuencias en la obra. El primero usa una base sub base para montarse mientras que el hormigón usa base, sub base y sub rasante.
Por otro lado, el asfalto necesita agregados y emulsión asfáltica para colocarse, mientras que el hormigón utiliza refuerzos de acero, lozas de hormigón fresco y juntas de dilatación.
En cuanto a la capacidad de resistencia, el asfalto se deforma con mayor facilidad y el hormigón resiste muy bien al peso, la carga, tracción, compresión y la lluvia. Sin embargo, este último necesita máquinas complejas y mucho más tiempo para su montaje.
Normalmente, se mezcla la gravilla con el craqueo del petróleo y se forma una masa. Si es una mezcla caliente, tiene que estar a 150 grados centígrados.
En el caso de que sea fría, se mezcla con unos agregados químicos, pero se utiliza en pequeñas cantidades.
Para calcular el rendimiento de los asfaltos de pavimentación depende del tipo de mezcla, el diseño, la clase de suelo, el terreno, el clima, la intensidad del tránsito y el material disponible que haya para la mezcla.